En estos tiempos de consumismo y de escasez de recursos, aparecen productos que buscan comercializar todo aquello que pueda constituir, aunque sea en pequeño grado, una utilidad para el ser humano. Cosas que antes no se imaginaban o se contemplaban para capitalizar, están apareciendo ahora como tendencias de belleza que nos tratan de señalar los ciegos que hemos sido ante las maravillas escondidas de tal o cual elemento. Una de esas cosas es la placenta, y otra de esas tendencias es el shampoo de placenta.
Este shampoo moderno no está exento de controversias. Generalmente se utiliza, para su elaboración, placenta de ovejas y vacas, o de vegetales pero, ya sea por investigación o por la desleal competencia entre marcas o tipos de producto, se ha sugerido que algunos productos utilizan la placenta de mujeres a las que se les dijo que sus servirían para estudios sobre el cáncer. Para contrarrestar las difamaciones, suele argumentarse que se sólo se utilizan elementos naturales provenientes de los animales y se nombran figuras públicas, como actrices o modelos, para publicitar su uso. Otros afirman usar otro tipo de placenta distinta a la animal o la humana: la placenta vegetal. Está placenta constituiría el alimento de los frutos en ciertas plantas y es producida en la zona del capullo. Se extraerían de las plantas mientras los frutos se encuentran en la etapa embrionaria.
La idea básica por la que se defiende al producto es que la placenta, ya sea animal o vegetal, contribuiría a la regeneración y revitalización de las células de la piel, del cuero cabelludo y de los cabellos; sus activos podrían permitir que además de limpiar y e hidratar el cabello, se pueda mejorar el mantenimiento y la renovación de los folículos pilosos. Al shampoo de placenta se le han atribuido propiedades específicas estimulantes del crecimiento del cabello, hecho que no puede sostenerse de manera absoluta e incuestionable. Con todo, este producto está tomando mucha fuerza en el mercado de los cosméticos capilares, pues favorece la penetración de otros productos, ya sea acondicionadores o medicamentos, destinados a combatir la calvicie.
El shampoo de placenta, que tiene más características de tratante que detergente, permitiría el lavado del cabello varias veces a la semana ya que disminuye la sequedad del cuero cabelludo. Sin embargo, el uso frecuente y excesivo de este producto puede provocar una seborrea adicional, provocando que se bloquen los esfínteres precapilares y dando a los cabellos un aspecto graso. Con dosis adecuadas, es de ayuda para el padecimiento del cabello oleoso, que conlleva un exceso de secreciones seborreicas, pero la necesidad de lavarlo más a menudo puede irritar las glándulas sebáceas y acentuar el aspecto aceitoso. No es aconsejable sobrepasar los 2 lavados por semana con este producto particular.
El shampoo de placenta consta en general de:
- Ya sea vegetal o animal. Las formarían componentes como los aminoácidos (alanina y prolina) y vitamínicos que tienen que ser hidrolizados para que puedan surtir los efectos de manera externa.
- Sustancias activas. Antisépticos de acción inespecífica, además de otros componentes a los que se le atribuye una especial actividad propiedad anti seborreica y anti alopécica. Pese a las numerosas fórmulas que existen actualmente en el mercado, sobre todo en el estadounidense, podemos hablar de activos que contienen todos los tipos de variedades y que son aplicables en todos los casos. Algunas fórmulas le agregan aminoácidos con la creencia de que serán absorbidos por el tallo capilar.
- Vehículos. Los productos que incorporan la placenta emplean como excipientes mezclas de agua, alcohol y aceites. Hay que recordar que el agua sola es poco humectante y penetrante, en cambio el alcohol y el aceite son excipientes muy buenos gracias a la gran cantidad de sustancias activas que pueden contener y disolver por su acción humectante, penetrante y antiséptica.
- El shampoo de placenta está destinado a tratar el cuero cabelludo muy seco y a la pitiriasis (exceso de sebo) simple. Para esto contiene emolientes capaces de remediar la sequedad natural o la producida por agentes externos.
- Al tratarse de un producto cosmético es de importancia la utilización de estos colorantes, para quitarnos esa relación acuosa hacia el embarazo y el parto que antes mencionamos.
- Se utilizan diversas mezclas de aceites esenciales o esencias artificiales para mejorar la presentación del producto. En general son de aroma cítrico o de frutos rojos.
Para utilizar este shampoo es suficiente con poco producto. Para tonificar el cuero cabelludo se recomiendan algunos movimientos de masaje haciendo espuma. Es muy importante enjuagar bien para no dejar residuos que luego se conviertan en algún problema por su acumulación.
La higiene del cabello requiere que después del lavado con el shampoo de placenta, o con cualquier otro shampoo, se haga un cepillado diario: el cepillo limpia el cabello, lo airea, lo tonifica y permite mantener el peinado. Más no hay que ser agresivos, especialmente con los niños, ya que el uso excesivo de los cepillos de cerdas rígidas y de punta afilada irrita el cuero cabelludo pudiendo abrirse puertas para la entrada de la piodermitis. El masaje durante el lavado con el shampoo, y el cepillado después no deben ser tan vigorosos que tironeen y tuerzan el cabello, quebrándolo. En las mujeres sobre todo, este mal hábito puede determinar la formación de nudos (triconodosis) por la acción mecánica combinada del lavado y el cepillado violento.