Reelance

El shampoo ideal.

El shampoo ideal es aquel que cumple las necesidades particulares de nuestro cabello, más allá de la simple limpieza de los folículos. Además de higienizar el cabello, es deseable que el producto que utilicemos también nos ayude a revitalizar desde la raíz, a refrescar nuestro cuero cabelludo, a equilibrar el flujo de grasa para que luzca fuerte, brilloso y manejable.

Hay que decir que es casi imposible conjuntar las propiedades de un shampoo con las propiedades de un acondicionador debido a sus funciones opuestas; uno elimina el sebo al contener elementos detergentes y el otro busca dotar al cabello de un sustituto para el sebo perdido en exceso o no producido para hidratar volviendo sedoso el cabello. Si el ideal reside es tener un shampoo que acondicione habrá que aceptar que es un ideal poco realizable. Por otra parte, existen combinaciones más alcanzables y realistas que pueden satisfacer nuestra búsqueda por el shampoo ideal. Por ejemplo hay fórmulas adicionadas con vitaminas, con aceites naturales o con componentes activos como el minoxiidl que hacen del producto todo un tratamiento regenerativo.

El shampoo ideal responderá al tipo de cabello que tengamos, por lo que es indispensable conocer las características y las deficiencias que tenemos para poder encontrarlo. Existen infinidad de opciones en el mercado que buscan satisfacer nuestro ideal, pero solo conociendo nuestras particularidades, nuestros deseos y nuestras necesidades podremos hallar ese producto ideal para nuestro cabello. Por ejemplo, si tu cabello tiende a resecarse o a presentar algún tipo de tricosis nudosa es muy importante que utilices algún shampoo con débil efecto detergente y con muchos aditivos grasos naturales como el aceite de argán o de jojoba. Si estas padeciendo algún proceso de alopecia, sobre todo de tipo androgénica, una fórmula que contenga fuertes elementos detergentes para combatir la seborrea y aditivos activos como el minoxidil será lo ideal. Para este tipo de casos, el shampoo de Reelance puede solventar todo lo que requiere una persona con problemas de exceso en la secreción sebácea y pérdida de cabellos; gracias a su concentración que contiene minoxidil al 2%, es el shampoo ideal para aquellos que quieran revitalizar sus folículos, y al mismo tiempo librarse de los residuos y agentes contaminantes en los tallos y las raíces.

A manera de generalización, podemos clasificar los tipos de cabello y los tipos de shampoos para facilitar encontrar nuestro shampoo ideal. Lo primero es que el producto que idealizamos y que queremos encontrar en la realidad debe oscilar entre las fórmulas con ph5 y ph7, ya que ese es nivel de acidez natural en el cabello. Esto implica sacar de nuestra idealización los productos que no han sido elaborados para uso humano, como el shampoo de caballo, que creemos que nos servirán de mejor manera por su efecto en otros seres vivos. Después vendrá el conocer si nuestro flujo de sebo es muy elevado, si nuestro cabello es muy fino o si lo traemos maltratado y dañado.

El saber este tipo de detalles nos evita caer en remedios, recetas o productos poco efectivos, nos evita el idealizar sin información relacionada con nuestra realidad. El tener conocimiento del conjunto de atributos que requerimos para nuestro tipo específico de cabello, facilitará el encontrar esos atributos de entre las etiquetas de los productos que suelen decir hacia qué tipo de cabello van dirigido: sea para cabello normal, cabello graso, cabello seco o cabello maltratado:

  • El shampoo para cabello normal utiliza detergentes a base de lauril sulfato, lo que le da la característica de limpieza con un mínimo de acondicionamiento. Estos productos funcionan bien para personas que producen poco sebo y tienen cabello grueso, sin embargo no son adecuados para personas con cabello fino y difícilmente manejable. Una buena alternativa para los que tienen para el cabello normal son los shampoos para niños, que no irritan los ojos y están formulados para ser agentes limpiadores suaves.
  • El shampoo para cabello graso tienen excelentes propiedades de limpieza y pocas como acondicionador. Se elaboran especialmente para adolescentes o personas que tienen el cabello graso o muy sucio. El problema con ellos es que, si se usan a diario, pueden resecar el tallo y si los usamos conjuntamente con algún acondicionador, maltrataran más de lo que sanaran.
  • El shampoo para cabello seco ofrece limpieza ligera y buen acondicionamiento. Estos productos resultan excelentes para personas maduras y para quienes desean lavarse el cabello diariamente. Reducen el frizz y vuelven más manejable el cabello fino y quebradizo.
  • El shampoo para cabello maltratado se elabora para personas que se han tratado químicamente con tintes permanentes, agentes decolorantes, soluciones para ondulado o alaciantes. Son muy similares a los shampoos sugeridos para el cabello seco, pero suelen diferenciarse por su fórmula equilibrada que impide que la cutícula se fragmente mucho con el lavado.

La diferencia para la elección entre los tipos generales la hará las particularidades de nuestros deseos, de nuestras preferencias y de nuestras necesidades. Habrá quien se dé cuenta que su cabello es graso, y para elegir de entre todas las opciones hará caso a su gusto por lo natural o por algún tipo de semilla, de hortaliza, de verdura o de fruta que este contenido en alguna fórmula. Habrá otros que preferirán los componentes activos sintéticos que pueden dar mayor efectividad como el minoxidil. Las posibilidades son infinitas, pero el conocer nuestras particularidades nos permitirá encontrar nuestro shampoo ideal en ese infinito.

10% off

Solicita este cupón dando click en “Solicitar”.