Si eres uno o una de los muchos que ahora estan sufriendo las consecuencias de este común padecimiento, no te alarmes, hay dos cosas bastante importantes que debes saber acerca de la alopecia. La primera: la alopecia no es una enfermedad extraña propia del siglo veintiuno que tan sólo te ha dado a tí, sino que es bastante común y en realidad muchísimas personas la padecen, bastantes artístas y famosos la han tenido. Segunda: al no ser, como se dijo, poco común, ha sido una enfermedad estudiada desde hace mucho tiempo, ya de la cual se tiene suficiente información, se conocen sus tipos y causas por lo que ahora para la mayoria de los casos se tiene una cura o solución.
Las soluciones se pueden clasificar en comprobadas y en no comprobadas. En el caso de las primeras, se tratan en su mayoría de consejos populares de los que algunas personas han dicho experimentar mejorías, y la gran mayoria no. Estan rodeadas de mitos y testimonios basados más en la sugestión que en la realidad. Estos no tienen bases comprobadas o jusficaciones de su mecanismo de acción contra la alopecia. Algunos no tienen ni estudios, mientras que los que los tienen no se encuentra sustento científico del por qué tales soluciones deberían brindar mejoría al que los use. De cualquier modo estas soluciones no comprobadas son mencionadas porque son una opción (aunque no muy viable, ni garantizada o confiable) y la elección es personal. Por otro lado las soluciones comprobadas, tienen mayor sustento: instituciones, estudios que las avalan, encuestas y gente que las ha comprobado y obtenido resultados muy satisfactorios.
Soluciones no comprobadas.
Masajes capilares. Son una técnica que se basa en la creencia de que frontando de cierta manera determinadas zonas del cuero cabelludo se estimula en este el crecimiento de cabello. Pueden llegar a ser utiles para la asimilación de algún producto contra la alopecia, pero en sí un masaje capilar no es una cura. De hecho son buenos para la relajación cuando se da la situación de que la alopecia es causada por nervios o estrés, dado que pueden relajarte, pero igualmente es posible relajarse por otros medios, e inclusive sin la dependencia del dinero como medio para obtenerlo.
Productos naturistas. Este tipo de productos son más un remedio. Es importante resaltar que el que los productos naturistas esten dentro de las soluciones no comprobadas, no quiere decir que lo comprobado este contra lo natural. Los productos naturistas sí brindan muchos beneficios para mejorar y reavivar la apariencia del cabello, tales como nutrirlo, hidratarlo, evitar su quiebre, ayudar a que sea moldrable, evitar su frizz, proterlo contra los daños del Sol etc. Pero, no nos dejemos llevar, modificar la apariencia del cabello, no es atacar la alopecia, o hacer que crezca cabello nuevo, es a lo mucho solamente fortalecerlo y evitar la pérdida masiva de mayores cantidades de cabello.
Soluciones comprobadas.
Finasteride. Es un medicamento activo que es considerado un agente muy efectivo. El finasteride inhibe el desarrollo de la alopecia. Su uso tanto en hombres como mujeres es limitado dado que tan sólo puede ser usado en personas postmenopáusicas por los efectos en ambos sexos. La desventaja recide en los efectos secundarios, mismos que son: En los varones: disminución de lo líbido, impotencia, disfunción eréctil y disminución del volúmen de la eyaculación. En las mujeres embarazadas: posibles daños al feto.
Injertos capilares. Esta medida ea tomada cuando se han eliminado las esperanzas de recuperar cabello en zonas donde se ha perdido. El procedimiento se basa en tomar el cabello de una zona sana (zona donante), que no padezca alopecia, e injectarla en las zonas del cuero cabelludo donde se encuentre la alopecia (zona receptora).
Minoxidil. Es un ingrediente activo tópico. Actúa como vasodilatador. Se ha comprobado su increíble eficacia para el crecimiento de cabello nuevo tanto en hombres como mujes, en concentraciones adecuadas. Estas no son muy diferentes para cada sexo, sencillamente disminuye un poco la concentración pertinente para su uso en mujeres, según la FDA.