Muchas veces como mujer tenemos las cejas muy desordenadas, con mucho pelo pero sin forma, esto es vital por que las cejas son las que le dan personalidad a nuestra cara y nos hacen lucir más estilizadas, por eso es importante que tengan una forma de acuerdo al tipo de nuestra cara, unas cejas bien arqueadas pueden cambiar completamente nuestra cara además de equilibrarla.
La ceja transmite diferentes expresiones dependiendo del ancho de la misma. Encontrar el equilibrio adecuado será suficiente para que tú te sientas cómoda con el grosor y el diseño.
Aquí te diremos los pasos para lograr unas cejas que te hagan resaltar tu mirada y te den un aspecto diferente:
*Mide la parte interior de tu ceja.
El punto donde empieza, necesita estar en el lugar adecuado para ayudar a dar forma a tu rostro y luminosidad a tus ojos.
Evita la apariencia de una única ceja haciendo que estén muy juntas o un entrecejo muy amplio haciendo que estén muy separadas.
*Sujeta un lápiz o pinzas verticalmente.
Alineados con la esquina interior de tu ojo. La intersección de esta línea y tu ceja es el punto en el que debe empezar la ceja.
Esta línea debe estar próxima al puente de tu nariz y no pasarlo. Cuando encuentres el punto perfecto de inicio, haz una marca con un lápiz de cejas.
Extiende la ceja ligeramente más allá de la esquina interna del ojo si tienes los ojos bien abiertos para mantener el equilibrio.
Usa el borde exterior de tu fosa nasal, en lugar de la esquina interna de tu ojo, como una guía si tus ojos tienen la forma de estar entrecerrados.
*Encuentra la longitud adecuada.
Toma el lápiz de cejas para realizar otra medida. Pon un extremo de tu lápiz en una aleta de tu nariz y alinéalo con la esquina externa de tu ojo en un ángulo de 45 grados. Esto te ayudará a encontrar el punto final perfecto para tus cejas.
El lugar al que llega el lápiz pasando la esquina de tu ojo es la longitud ideal para tu ceja. Haz una marca en ese punto con tu lápiz de cejas.
*Encuentra tu arco.
Alinea el lápiz con la esquina de la aleta de tu nariz y el centro de tu pupila cuando miras de frente. El punto al que llega el lápiz sobre tu ceja es el lugar donde debe ir el arco.
Debería estar aproximadamente a 3/4 desde el punto de inicio de tu ceja.
Tu arco no debe estar en el centro o demasiado cerca del final de tu ceja, ya que esta forma te hará parecer sorprendido o aburrido.
Tu arco debe tener siempre una curva natural si tienes una cara ovalada y un ángulo agudo si tienes una cara redonda.
*Crea la forma adecuada.
Usa tu lápiz de cejas para rellenar toda la ceja desde el principio hasta el final. Sigue el grosor natural de tus cejas, pero si son demasiado espesas o gruesas, depílalas para hacerlas más finas.
Rellenar tus cejas antes de depilarlas no te ayudará a quitar muchos pelos ni a ser más consciente de su forma.
Tus cejas tienen que ser al menos tan anchas como tres líneas del lápiz de cejas. Si son demasiado finas, no darán forma a tu rostro.
*Elimina el exceso de pelo.
Usa unas pinzas de depilar anguladas para arrancar los pelos que sobresalgan de la forma de tu ceja. Intenta no quitar demasiados de la parte superior ya que alteraría demasiado la forma y ángulo y las haría parecer demasiado bajas. En su lugar, quita pelos de la parte inferior y los bordes exteriores de tu ceja.
Arranca los pelos desde la base para evitar romperle las raíces.
Quita los pelos del entrecejo y sobre tu nariz para quitar la ilusión de una única ceja.
No olvides depilar también la “pelusilla” que suele encontrarse en la parte superior del párpado. Si no la quitas puede dar la sensación de unas cejas despeinadas y sin arreglar.
Ahora ya sabes cómo darle forma a tus cejas para que luzcas una mirada con personalidad, recuerda que las cejas son el marco de nuestra cara y hacen la diferencia para hacernos lucir bien.