Primero que nada, es natural preguntarse, además de si ¿es bueno cepillarse el cabello?, ¿para qué será bueno? O en su defecto ¿para qué será malo? Pues bien, nos referimos sencillamente a que si es benéfico o no en la salud del cabello. Y respecto a esto, la respuesta que nos indican los expertos, es sí y no.
Por doquier escuchamos, leemos o vemos que los excesos son perjudiciales, y con el cabello desgraciadamente, no se trata de una excepción. Para ejemplificarlo un poco podemos recurrir a nuestras experiencias. Muchas mujeres quizá nos recordamos a nosotras mismas de pequeñas cuando nos cepillábamos el cabello una y otra vez frente al espejo, y probablemente más de dos ocasiones al día. Lo hacíamos inocentemente y con abundante esmero, buscando así tener un cabello más manejable y bonito. Y aunque las intenciones eran buenas, seguramente más de alguna de nosotras recordamos ese friz inevitable que vino luego de tanto cepillado, además de otras posibles consecuencias desagradables provenientes de un cepillado excesivo. No obstante, el cepillarnos el cabello, es algo benéfico mientras no se abuse de él. Los expertos nos dicen que sí es bueno cepillarse el cabello. Las consecuencias negativas vienen no de cepillarse el cabello, sino de hacerlo con demasiada frecuencia.
¿Cepillarse y desenredarse el cabello es lo mismo?
Usualmente en la vida cotidiana llegamos a utilizar estos dos términos indistintamente, es muy común que lo hagamos. Pero estos términos son distintos, es muy importante diferenciarlos. Ya que con el fin de deshacer los nudos del cabello, lo desenredamos, mientras que el cepillado es la acción que sigue al desenredado y tiene otros beneficios.
¿Cuáles son las ventajas?
El cepillarse el cabello es buenísimo no sólo para volver más manejable el cabello, ya que sirve además para estimular la circulación de la sangre en el cuero cabelludo (que repercutirá positivamente en la salud y brillo de tu cabellera) y ayudará a retirar las impurezas que se adhieren al cabello. Por esta última razón se aconseja que el cepillado de la cabellera se realice por la noche. Si de niña también realizabas esto, hacías algo muy bueno para tu cabello, aunque sin conocer muy bien el por qué.
Respecto a la frecuencia, es recomendable hacerlo hasta dos veces al día, una por la mañana y la de la noche. De este modo, activaras la microcirculación por las mañanas y limpiarás el cabello en la última cepillada del día. Aunque, para que esto pueda suceder correctamente, es necesario que las cerdas del cepillo toquen el cuero cabelludo. El cepillado excesivo, lejos de ser benéfico puede ocasionar problemas en la salud de tu cabellera.
Cuidado con…
Otro detalle muy importante, al que en ocasiones no le damos la importancia que tiene, es la intensidad con la que nos cepillamos y desenredamos. Procuremos que estas no sean de un modo demasiado intenso y fuerte, por más nudos que tengas, puesto que de hacerlo así, naturalmente perderemos muchísimo cabello, además de ocasionarle un posible maltrato sarpullido o enrojecimiento. Y nuestra pérdida de cabello se verá aumentada por esta acción. Además de que se puede aumentar la producción de grasa de nuestro cuero cabelludo.
Un error que muchas y muchos cometemos, es cepillarnos el cabello cuando este aún se encuentra mojado, sin esperar a que se seque ya sea por las prisas o el desconocimiento del daño generado. El cabello húmedo, es mucho más débil y propenso al quiebre, por lo que es una mejor idea esperar hasta que este se seque antes de cepillarlo. Por extensión, no es la mejor opción dormirse cuando se tiene el cabello húmedo o mojado, ya que se pueden generar daños en el cuero cabelludo o cutícula.
Si fumas, es muy recomendable que no olvides cepillar diariamente tu cabello, ya que el humo del tabaco dejara residuos en el cabello que afectan al cuero cabelludo y su salud. El cepillado ayudará a limpiar el cuero cabelludo pero recuerda no abusar.
¿Y el cepillo?
En lo que compete al cepillo, no es necesario uno de “última generación”. Lo mejor es que sean cepillos planos si tienes un cabello lacio. Mientras que si tienes un cabello rizado te puede ayudar más un cepillo con dientes anchos. Para dar brillo los peines hechos con materiales naturales son muy buena opción (como los de cerdas de jabalí). Aunque para desenredar nuestro cabello, un buen cepillo es el que tiene cerdas de nylon, pues su flexibilidad facilitará que se deslice entre tus cabellos. Respecto a cualquier cepillo, lo que sí es conveniente, es lavarlo, de vez en cuando. Recordemos que se ensucia, y el mantenerlo limpio es parte de higiene necesaria. Puedes lavarlo cada quince días, o una ocasión al mes, con agua y un poco de jabón o shampoo estará bien.
A veces, es común que descuidemos el cepillado, pero hacerlo es sencillo y bastante benéfico. Esta técnica que solía ser un hábito y que normalmente descuidamos, es una de las más simples y benéficas que está al alcance de todos. Sin contar que no requiere mayores recursos que el gasto del cepillo y la dedicación que le demos ya sea una vez o dos al día. En conclusión, es bueno cepillarse el cabello, sin importar los tratamientos u otros productos que estemos utilizando, la cepillada siempre podrá ir de la mano con ellos, mejorando sus resultados, tu salud y apariencia.